El gran desfile es una película estadounidense dirigida por King Vidor en el año 1925. Considerada como una de las obras maestras del cine mudo, esta película narra la historia de dos jóvenes estadounidenses que se ven envueltos en la Primera Guerra Mundial. Con un presupuesto de 2 millones de dólares, El gran desfile fue un éxito de taquilla y crítica, convirtiéndose en la película más taquillera de la época.
La película cuenta la historia de Jim Apperson y Bull O’Hara, dos amigos que se enlistan en el ejército para luchar en la Primera Guerra Mundial. A lo largo de la película, se muestra cómo la guerra afecta a estos jóvenes y cómo deben enfrentarse a situaciones extremadamente difíciles. Además, se muestra el contraste entre la vida en el frente de batalla y la vida en casa, lo que hace que la película sea aún más impactante.
Uno de los aspectos más destacados de El gran desfile es su técnica cinematográfica innovadora. King Vidor utilizó técnicas de cámara novedosas, como el uso de la cámara en mano y la mezcla de imágenes reales con imágenes de archivo. También se destacan las secuencias de batalla, que fueron filmadas con un gran realismo y sin censura, lo que causó un gran impacto en la audiencia.
La película cuenta con un reparto de actores desconocidos en su momento, pero que posteriormente se convirtieron en estrellas de Hollywood. Entre ellos se encuentran John Gilbert, Renée Adorée y Karl Dane. Sin embargo, la verdadera protagonista de la película es la actriz Eleanor Boardman, quien interpreta a la enfermera francesa Melisande.
El gran desfile fue un éxito rotundo en la taquilla y recibió una gran cantidad de elogios por parte de la crítica. Fue nominada a cinco premios Oscar, incluyendo Mejor Película y Mejor Director, pero finalmente solo ganó en la categoría de Mejor Película Dramática en los Premios de la Academia de Nueva York.
Una de las anécdotas más interesantes de la película es que el director King Vidor se inspiró en sus propias experiencias en la Primera Guerra Mundial para crear la historia. Además, durante el rodaje, el equipo de producción tuvo que lidiar con varios desafíos, como la falta de luz natural en algunas escenas o la construcción de una réplica de una trinchera de guerra.
El gran desfile es una película que trasciende el tiempo y sigue siendo considerada como una de las mejores películas de la historia del cine. Su impacto en la audiencia y en la industria cinematográfica fue enorme y sentó las bases para futuras producciones bélicas. Sin duda, es una película que no puede faltar en la lista de clásicos imperdibles del cine.